¿UNA CIUDAD EN DECADENCIA?

Hace unos días leíamos en los diarios locales que Santa Cruz de La Palma era una ciudad con ciertos rasgos de decadencia, y que si no reaccionaba urgentemente podría convertirse -textualmente- en una "ciudad contemplativa". Y la descripción no era de ningún político (¡imposible, claro! -no es políticamente correcto decirlo-), sino de un economista: el catedrático palmero José Ángel Rodríguez.

Ya advertía en un artículo de hace unos meses (sobre la gobernanza local) la necesidad que tenía nuestra capital de implementar políticas activas o, mejor proactivas, de desarrollo. No es suficiente con rehabilitar algunas de nuestras calles (como el entorno de Santo Domingo y San Telmo, que considero muy acertado, aunque se ataque de una vez -lo que quedaba-, y se produzca un cierto caos circulatorio, para no perder los fondos estatales anti-crisis), si no acometemos su puesta en valor, esto es, si no se ejecutan medidas que promuevan el desarrollo de esas zonas que rehabilitamos. Mutatis mutandis, es decir, salvando las distancias, proponía convertir ese barrio en una suerte de Montmartre de París o Barrio Alto de Lisboa. Pero, bueno, seguro que estaba delirando...

Apuntaba el profesor palmero que una de las mejores iniciativas previstas era la playa de la ciudad. Y yo comparto el aserto, aunque pudiera ser tambien cualquier otra actuación importante pero en el mismo sentido. Me explico: lo que urge es recuperar el litoral. Santa Cruz de La Palma necesita con urgencia recobrar el mar, recuperar su costa, que ahora está depauperada y degradada. No se ganan terrenos al mar para convertirlos eternamente en un depósito espantoso de coches.

Una ciudad en decadencia, pues acaso sí, aunque duela. Gestión urbanística (Plan General de Ordenación) -porque no la ha habido-, Estación Insular de Guaguas, Recinto Ferial, Pabellón polideportivo, Litoral, etc., pero sobre todo buenas ideas y capacidad para desarrollarlas diligentemente. Aún estamos a tiempo de reaccionar...