UNA REFERENCIA INELUDIBLE EN LA HISTORIA DEL BALONCESTO PALMERO
Francisco Martín Hernández, más conocido como Pancho o Panchito Martín (Santa Cruz de La Palma, 1933), fue la figura más destacada del baloncesto palmero durante más de dos décadas, primero como jugador, defendiendo los colores del Frente de Juventudes, y luego como entrenador y alma mater del Club Baloncesto La Palma, el primer club de la isla en participar en las ligas provinciales y regionales de la historia del baloncesto insular (1967-1977).
Pancho Martín fue el jugador más determinante del histórico Frente de Juventudes, el principal club palmero de los años cincuenta que presidía Jaime García y García, en competida lid con el Arsenal de Elirerto Galván. Un equipo que, entre otros, contaba con Idafe Santiago, Juan Hernández Chaleca, Lalo Pinto, Chachín Arozena, Manolo Cantillo, Pedro Miguel Santiago, Ernesto Zanoletty, Félix Poggio, Agustín Francisco, Eduardo Ortiz, Blas Vandewalle o Ramón Acosta (Acosta y Vandewalle jugarían también con El Batallón y algunos otros -como Francisco, Ortiz o Poggio- pasaron pronto a engrosar las filas de su primera escisión, el San Fernando). Aún se recuerdan sus memorables actuaciones ante el Náutico y el Canarias en el verano de 1953, que concluyeron con sendas victoria de los jóvenes palmeros (35-34 y 43-33, respectivamente), o ante el Náutico, ahora mucho más bregado, en el verano de 1960, representando a una selección de la isla, con la participación del mítico Antonio Díaz-Miguel. Finalmente, ya en la temporada 1964-65, Martín terminaría jugando en el potente San Fernando, campeón tres campañas seguidas, haciendo tripleta estelar con el imberbe Julio Plata y con el más talludito Juan de la Barreda.
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| Frente de Juventudes, 1953 |
Pero Francisco Martín Hernández fue quizás más importante como entrenador que como jugador. Pancho había comenzado a entrenar también en los años cincuenta, dirigiendo a los juveniles del Frente de Juventudes. Ya en los años sesenta entrenaría al San Fernando, conjunto que jugaría la primera eliminatoria por el ascenso a Segunda División en 1966, en enfrentamiento a doble vuenta contra el Náutico B. Pero su principal contribución al baloncesto palmero será, sin duda, el Club Baloncesto La Palma, club creado en 1967 por Martín (y varios de sus amigos), que inauguraría, con su participación en la Tercera División Nacional en la temporada 1967-68, una nueva etapa de la historia del baloncesto insular. Pancho Martín dirigiría a la escuadra palmera durante nueve de sus diez temporadas de vida; solo fallaría en la campaña 1974-75, en la que conseguiría el sorprendente fichaje de Moncho Monsalve como preparador, lo que se convertiría en otro punto de inflexión del baloncesto insular. Pero Martín siempre sería mucho más que un mero entrenador en el club que presidía su amigo Manolo Pérez Cantillo. De la peripecias de este equipo (incluida su inolvidable participación en la fase de ascenso a Segunda División Nacional celebrada en Valladolid la temporada 1975-76, con el norteamericano David Kundla en sus filas) ya hemos dado cuenta suficiente en otras entradas de este blog, por lo que no nos extenderemos más.
El club desaparecería en 1977, acuciado por importantes problemas económicos, cierta desatención de las instituciones públicas y de la Federación Provincial, que presidía Víctor Floreal Concepción, y el empuje, en otra dirección, de algunos jóvenes de entonces que fundarían la Asociación de Amigos del Baloncesto de La Palma (U.B. La Palma). Al tiempo, sus promotores terminarían también por alejarse del baloncesto y, entre ellos, el propio Pancho Martín, al que no veríamos cerca de una cancha de baloncesto durante mucho tiempo. Fueron, pues, cerca de treinta años de dedicación y entrega al baloncesto insular, en primera línea de fuego, sin que pueda entenderse el básquet palmero de la época sin su contribución. Por eso, Pancho Martín ocupa un lugar preeminente en la historia de este deporte en La Palma, con méritos más que suficientes para que reciba el homenaje que sin duda merece y le debe nuestro baloncesto.
El club desaparecería en 1977, acuciado por importantes problemas económicos, cierta desatención de las instituciones públicas y de la Federación Provincial, que presidía Víctor Floreal Concepción, y el empuje, en otra dirección, de algunos jóvenes de entonces que fundarían la Asociación de Amigos del Baloncesto de La Palma (U.B. La Palma). Al tiempo, sus promotores terminarían también por alejarse del baloncesto y, entre ellos, el propio Pancho Martín, al que no veríamos cerca de una cancha de baloncesto durante mucho tiempo. Fueron, pues, cerca de treinta años de dedicación y entrega al baloncesto insular, en primera línea de fuego, sin que pueda entenderse el básquet palmero de la época sin su contribución. Por eso, Pancho Martín ocupa un lugar preeminente en la historia de este deporte en La Palma, con méritos más que suficientes para que reciba el homenaje que sin duda merece y le debe nuestro baloncesto.
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| C.B. La Palma 1976-77 |
Los que conocemos a Pancho valoramos su trayectoria, sus opiniones y, sin duda, creemos que se merece un más que merecido homenaje.
ResponderEliminartambien entreno al equipo femenino del instituto alonso perez diaz en los años 1962 63 asta el 1965 yo participaba en ese equipo muy buena persona y muy buen entrenador te recuerdo siempre
ResponderEliminarUn personaje. ¡Si señor!
ResponderEliminarPancho Martín merece pronto un homenaje. Cada vez queda menos gente que sabe de verdad todo lo que hizo por el baloncesto en la isla. Un señor! Lástima la poca memoria que tenemos.
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