75 AÑOS DE BALONCESTO EN LOS LLANOS

Probablemente pasará desapercibido el aniversario, pero este miércoles se cumplirán 75 años del primer partido de baloncesto disputado en Los Llanos de Aridane. El 2 de septiembre de 1934, a las cinco y media de la tarde, se inauguraría la primera cancha del entonces “basket-ball” en ese municipio, un campo de tierra en la calle Calvario (popularizado como “cancha de la placeta”), con un encuentro entre los equipos del Pirata B.B.C. y Olímpico B.B., que finalizaría con el resultado de 4-2 favorable a los primeros.

En Los Llanos, el baloncesto lo había introducido Severo Rodríguez Hernández, que, aunque hijo de isleños, había nacido en Cuba, y de ahí que se le conociera con el apelativo de “el americano”. Vendría a La Palma con apenas 14 años en 1928, pero con el suficiente conocimiento de un deporte, que había practicado de niño (por la influencia americana, México y Cuba fueron los primeros países a los que se extendió el baloncesto), para enseñar a los precursores del “basket-ball” en Los Llanos a partir de 1933-34. Como consecuencia de ello, pronto se pondría en marcha también una competición, en la que sería campeón el potente Pirata BBC (se impondría al Olímpico), con el propio Severo Rodríguez y Carballo de “estrellas”. Este equipo se enfrentaría ese mismo año en varias ocasiones, con resultados favorables, con equipos de la capital (Rayo, Arsenal). En la competición participarían también equipos como el Nápoles (Darino, Pepe, Juan, Rosendo y Pedrito) o el Tanausú, destacando, entre los árbitros, Arvelo.

A principios de 1935, se disputarían nuevos partidos entre equipos de Los Llanos y Santa Cruz de La Palma. El Olímpico (Ricardo, Vicente, Manolo, Octavio y Manuel), subcampeón del Valle de Aridane, se impondría al Rayo, por 19-16, y el Pirata (Orestes, Vicente, Tomás, Severo y Viña), campeón, haría lo propio con el Palma, por 17-14. Al final de la temporada, se disputó asimismo una denominada “Copa de la isla”, en la que participarían tanto los dos primeros clasificados de Santa Cruz de La Palma (Arsenal y Terror) como de Los Llanos (Pirata y Olímpico). En esta ocasión, las victorias (a doble partido) sonreirían a los equipos de la capital, que jugarían la final insular, con triunfo, contra pronóstico, del Terror, que había eliminado a los dos campeones. Por si había alguna duda, los “terroristas” también vencerían al Nápoles, en partido amistoso.

En la temporada 1935-36 el Pirata se impondrían en una Copa que se disputaría como antesala al campeonato, y que provocaría un cruce de acusaciones entre las federaciones de Santa Cruz de La Palma y de Los Llanos por la supuesta apropiación indebida de 30 pesetas destinadas a los trofeos. Finalmente, tras un breve paréntesis, en mayo de 1936 se inauguraba una nueva temporada, con un encuentro entre el Nápoles (Felipe, Mangolo, Nino, Pedrito y Quelo) y un combinado del Pirata y Hércules (Orestes, Quico, Antonio, Toñín y Severo), en la que también intervendrían nuevos equipos, como el Atlántida y el Bolero.

En julio de 1936, en el Stadium del C.D. Tenerife y en el antiguo campo del Hespérides, tendrían lugar dos enfrentamientos entre las selecciones de Tenerife y La Palma, organizados por el Comité Pro Olimpiada Popular de Barcelona. En el combinado palmero formarían dos jugadores llanenses, el propio Severo Rodríguez y Manuel Pérez Acosta, además de Sergio Pérez Escanaverino, Kerensky Arrocha y Miguel González, a los que acompañaban Antonio Molina, como representante del Comité en La Palma y Oscar Pérez Algarrada, como directivo. De esos encuentros saldría una selección canaria para participar en dicha “Olimpiada”, a celebrar entre el 19 y el 26 de julio, que finalmente formarían sólo los jugadores palmeros (incluidos, por tanto, los llanenses Rodríguez y Pérez Acosta) más el tinerfeño Enrique Alonso, vista la superioridad demostrada por el “quinteto” de La Palma en ambos partidos (ganando el trascendental encuentro del Stadium por 31-11). No obstante, el viaje a Barcelona, previsto para el día 18, lo frustraría de raíz el levantamiento militar.