J.J. Rodríguez-Lewis
Publicado en La Gaceta de Canarias, el 18 de octubre de 1992
La compañía Binter (en especial Binter Canarias) está de rigurosa actualidad. Esto es un hecho incuestionable. Su nueva programación y, fundamentalmente, las condiciones operativas de su avión CASA Nurtanio 235, de fabricación española, tienen la culpa. Pero, lamentablemente, ésto no es todo. Además, la compañía Binter miente. El pasado lunes, Fiesta Nacional, Binter cancelaba un vuelo a La Palma, desde Tenerife Sur, por causas meteorológicas adversas en el Aeropuerto de Mazo, cuando la mayoría de los pasajeros conocían de la operatividad durante todo el día del aeropuerto palmero. De sobra se sabía que los retrasos producidos por los traslados de los vuelos de Los Rodeos al Reina Sofía había provocado que este vuelo desde el Sur acumulara todo el retraso anterior. Después, con el ocaso del día, el vuelo terminó por cancelarse, pero no por la circunstancia esgrimida, sino porque ya era de noche y el aeródromo palmero no opera cuando el sol se ha puesto. Otra mentira.
Por tanto, los viajeros se buscaron la vida aquella noche e intentaron, los más, conseguir plaza en los primeros vuelos del día siguiente. No obstante, de nada sirvió el madrugón. Tres señoritas del Grupo Iberia (Binter lo es) abrieron sus mostradores discrecionalmente, y saltándose a la torera la oficiosa lista de espera, empezaron a despachar como si de Alcampo se tratara, y sin ningún tipo de rubor ante las protestas de algunos madrugadores. Luego, obtenida la plaza, el frecuente mal tiempo en Los Rodeos, hizo que los dos primeros vuelos a La Palma se trasladaran al Reina Sofía. Las maletas, metidas arbitrariamente en cuatro guaguas, alguna incluso con pasajeros a Fuerteventura, casi se pierden.
Ya en el Sur, el vuelo, que primitivamente iba a las 7:30 horas, era a las 9:30 horas. Aparte de un inexplicable nuevo retraso, Binter vuelve a mentir. Las razones aducidas, las mismas: causas meteorológicas adversas en el aeropuerto de Mazo, cuando también era vox populi que en este mismo aeropuerto ya había pernoctado un vuelo de Las Palmas. A las once, parece que por fin estos vuelos despegan. Sin embargo, ahora sí, efectivamente, causas meteorológicas adversas en La Palma impide que aterricen. Y vuelta a Tenerife Sur.
Con los viajeros destrozados, a las 3:30 de la tarde, parece que es definitivo. Los dos primeros vuelos a La Palma salen al fin con destino cierto. Los pasajeros del primer vuelo rezan, pero no por ellos mismos o para dar gracias, lo hacen por los del otro vuelo: van en un Casa Nurtanio.
La compañía Binter (en especial Binter Canarias) está de rigurosa actualidad. Esto es un hecho incuestionable. Su nueva programación y, fundamentalmente, las condiciones operativas de su avión CASA Nurtanio 235, de fabricación española, tienen la culpa. Pero, lamentablemente, ésto no es todo. Además, la compañía Binter miente. El pasado lunes, Fiesta Nacional, Binter cancelaba un vuelo a La Palma, desde Tenerife Sur, por causas meteorológicas adversas en el Aeropuerto de Mazo, cuando la mayoría de los pasajeros conocían de la operatividad durante todo el día del aeropuerto palmero. De sobra se sabía que los retrasos producidos por los traslados de los vuelos de Los Rodeos al Reina Sofía había provocado que este vuelo desde el Sur acumulara todo el retraso anterior. Después, con el ocaso del día, el vuelo terminó por cancelarse, pero no por la circunstancia esgrimida, sino porque ya era de noche y el aeródromo palmero no opera cuando el sol se ha puesto. Otra mentira.
Por tanto, los viajeros se buscaron la vida aquella noche e intentaron, los más, conseguir plaza en los primeros vuelos del día siguiente. No obstante, de nada sirvió el madrugón. Tres señoritas del Grupo Iberia (Binter lo es) abrieron sus mostradores discrecionalmente, y saltándose a la torera la oficiosa lista de espera, empezaron a despachar como si de Alcampo se tratara, y sin ningún tipo de rubor ante las protestas de algunos madrugadores. Luego, obtenida la plaza, el frecuente mal tiempo en Los Rodeos, hizo que los dos primeros vuelos a La Palma se trasladaran al Reina Sofía. Las maletas, metidas arbitrariamente en cuatro guaguas, alguna incluso con pasajeros a Fuerteventura, casi se pierden.
Ya en el Sur, el vuelo, que primitivamente iba a las 7:30 horas, era a las 9:30 horas. Aparte de un inexplicable nuevo retraso, Binter vuelve a mentir. Las razones aducidas, las mismas: causas meteorológicas adversas en el aeropuerto de Mazo, cuando también era vox populi que en este mismo aeropuerto ya había pernoctado un vuelo de Las Palmas. A las once, parece que por fin estos vuelos despegan. Sin embargo, ahora sí, efectivamente, causas meteorológicas adversas en La Palma impide que aterricen. Y vuelta a Tenerife Sur.
Con los viajeros destrozados, a las 3:30 de la tarde, parece que es definitivo. Los dos primeros vuelos a La Palma salen al fin con destino cierto. Los pasajeros del primer vuelo rezan, pero no por ellos mismos o para dar gracias, lo hacen por los del otro vuelo: van en un Casa Nurtanio.
* La foto es de www.aviationcorner.net
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