J.J. Rodríguez-Lewis
Publicado en Diario de Avisos, el 7 de septiembre de 1988
Concluye estos días, en las salas del Aula de Cultura “Elías Santos Abreu” y en la de la UNED, una extraordinaria exposición de escultura y pintura, que recoge los trabajos más interesantes de una pléyade de jóvenes valores de nuestro panorama insular en el mundo de las bellas artes. Éstos, recientes licenciados o estudiantes aún, conforman una rara especie en el entorno de nuestra juventud y demuestran cada año la llama viva de una inquietud incólume.
Ocho jóvenes, de verdad comprometidos con su tiempo y con su quehacer, que nos ofrecen una maravillosa muestra de sus vidas enmarcadas en acuarelas, poliéster o carbonilla. Ocho jóvenes, Antonio Guillermo, Francisco, Angeles, Mónica, Isaías, Juan Francisco y Rosa, que entienden del espíritu arrollador y fértil de sus facultades y no se rinden ante la escasa sensibilidad de su congéneres y compañeros de ecosistema.
Mi particular reconocimiento comprende dos tipos de enhorabuena. La primera de ellas, por ese estupendo trabajo, notabilísimo para todos los que han venido visitando la exposición, que confirma el buen hacer de nuestros jóvenes artistas. La segunda quiere resaltar su inquietud, su actividad dirigida el reconocimiento generalizado. Felicidades.
gracias por tus palabras Juan José, que aún después del tiempo transcurrido desde que escribiste esta entrada viene como anillo al dedo para dedicarla a todo joven con las ganas, esfuerzo, ilusión y trabajo que pone en cada obra. No hay tiempo ni espacio cuando se habla de arte..
ResponderEliminarFelicidades de nuevo, Juanjo